Aunque parezca obvio, primero, piensa qué necesitas. Por ejemplo, ¿quieres tener línea de teléfono fijo o prefieres datos, o ambos? La luz y el gas también se pueden contratar con una misma compañía. Las nuevas tarifas de libre mercado que se publicitan como “Tarifas planas” te permiten unir productos a la factura (luz y gas, por ejemplo) con la promesa de que el conjunto te salga más barato.
Si la compañía te propone un plan combinado, primero haz cuentas y comprueba si realmente ahorrarás o pagarás más. Algunas empresas añaden servicios adicionales a los contratos de gas y luz. Por ejemplo, en el gas, la revisión anual de la instalación o su mantenimiento. Aunque pueden significar descuentos el primer año, a largo plazo, encarecen la tarifa.